Pues bien, son los llamados abrefáciles, aunque... más que ayudarte a abrir el bote, lata, botella, etc... lo único que hacen es dificultar más su apertura; por lo que al final terminas cortando con unas tijeras o un cuchillo por cualquier parte.

Aunque el peor abrefácil es, sin ninguna duda, ese plastiquillo rojo que envuelve todos y cada uno de los paquetes de galletas, de los que hay que estirar para abrirlos. Resulta que ese "abrefácil" es difícil hasta de encontrar su extremo, ya que cada vez se acercan más a la parte central de la caja (yo hasta he llegado a pensar que lo hacen aposta para obligarte a comer todas las galletas que se quedan fuera y así terminar antes la bolsa para tener que comprar más; como estrategia, sinceramente, es buenísima).
Corregido hasta aquí.
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